Transferencia del tendón de la mano

Principios de la transferencia tendinosa: Una guía completa para la restauración de la función

Las transferencias tendinosas son procedimientos quirúrgicos críticos diseñados para restaurar funciones perdidas o comprometidas debido a lesiones nerviosas, anomalías congénitas u otras afecciones musculoesqueléticas. Estos procedimientos se han convertido en parte integrante de las cirugías ortopédicas y de la mano, sobre todo en los casos en que las lesiones nerviosas o los desequilibrios musculares han alterado el funcionamiento normal.

Introducción a la transferencia de tendones

Las transferencias tendinosas sirven como sustitutos para restablecer la acción muscular cuando lesiones de nervios periféricos, desequilibrios musculares o afecciones como ictus, parálisis cerebral o poliomielitis alteran la función normal. Estas cirugías consisten en desviar tendones de una unidad funcional a otra para compensar los movimientos perdidos o deficientes. Este proceso puede ser temporal o permanente, dependiendo de la gravedad de la lesión o afección. Aunque la transferencia de tendones puede ayudar a recuperar la función crítica de la mano y la extremidad, suele plantearse cuando la recuperación o curación de los nervios es improbable o insuficiente.

En la cirugía de transferencia tendinosa, el tendón se libera de su inserción original o se redirige a un nuevo sitio funcional. Esto contrasta con el injerto tendinoso, en el que un tendón completamente seccionado se utiliza como pieza intermedia sin conservar su suministro neurovascular original. Por lo tanto, las transferencias tendinosas brindan la oportunidad de compensar las funciones perdidas, sobre todo cuando no se espera que se produzca la regeneración nerviosa.

Principios clave de la transferencia de tendones

1. Evaluación preoperatoria

Antes de proceder a la cirugía de transferencia tendinosa, es esencial evaluar el estado general del paciente. Esto incluye evaluar la causa y el alcance de la pérdida de función muscular, los músculos donantes disponibles para la transferencia y el estado de salud general del paciente. El cirujano también debe determinar las expectativas del paciente y establecer objetivos realistas para la recuperación. Esto es especialmente importante, ya que la cirugía de transferencia tendinosa, aunque eficaz, no siempre restablece por completo todas las funciones perdidas.

Las pruebas de electrodiagnóstico, incluida la electromiografía (EMG), pueden ser muy útiles para calibrar el alcance del daño nervioso y predecir la posible recuperación. Estos estudios también pueden ayudar a identificar los músculos prescindibles para la transferencia, como el pronador redondo en casos de parálisis del nervio radial.

2. Tiempo y equilibrio tisular

El concepto de equilibrio tisular se refiere a garantizar que la zona quirúrgica se encuentre en condiciones óptimas para el procedimiento de transferencia tendinosa. El tejido cicatricial, el edema y la rigidez articular pueden dificultar el éxito de las transferencias tendinosas. Antes de llevar a cabo el procedimiento, debe lograrse una cicatrización y maduración adecuadas del tejido para garantizar el mejor resultado posible. En determinados casos, los cirujanos pueden recurrir a colgajos de tejido blando o barras de silicona para crear una vía ideal para la reconducción tendinosa.

3. Selección de los músculos donantes

Uno de los aspectos más críticos de la cirugía de transferencia tendinosa es la elección del músculo donante adecuado. El músculo donante debe poseer suficiente fuerza y excursión para realizar la función deseada en la zona receptora. Normalmente, la fuerza de un músculo donante se evalúa utilizando la escala de Lovett, que clasifica la fuerza muscular en una escala de 0 (sin movimiento) a 5 (fuerza total). Un músculo donante ideal debe tener una calificación de al menos 4 ó 5 para garantizar el éxito de la transferencia tendinosa.

Además, el músculo donante debe ser prescindible, lo que significa que su pérdida no comprometerá significativamente la función de la zona a la que servía originalmente. Por ejemplo, el flexor cubital del carpo puede utilizarse como músculo donante en casos de parálisis del nervio radial, siempre que quede suficiente función en los flexores de la muñeca.

4. Excursión y línea de tracción

La excursión, o la distancia que puede desplazarse un tendón, es vital para el éxito de la transferencia. Para que una transferencia tendinosa sea eficaz, la excursión del tendón donante debe coincidir con la del tendón receptor. Factores como la longitud del músculo, la longitud de las fibras del tendón y la amplitud de movimiento de la articulación influyen a la hora de determinar la posibilidad de que la excursión del tendón sea satisfactoria. El objetivo del cirujano es conseguir la tensión correcta en el tendón donante para facilitar un movimiento suave y funcional en la zona receptora.

La línea de tracción es otro factor crítico. El tendón donante debe reconducirse con una línea lo más recta posible para evitar complicaciones como la tensión excesiva o la desalineación. La eficacia de la transferencia se ve comprometida si el tendón debe pasar por múltiples poleas de redireccionamiento o someterse a una tensión excesiva.

5. Sinergismo

El sinergismo en las transferencias tendinosas se refiere a la idea de que el músculo donante debe contraerse en sincronía con el músculo receptor para aumentar la eficacia de la transferencia. Por ejemplo, transferir un flexor de la muñeca a un extensor del dedo en casos de parálisis del nervio radial es una transferencia sinérgica que garantiza un movimiento coordinado. Este tipo de transferencias son más fáciles de aprender y resultan especialmente beneficiosas para los pacientes más jóvenes con mayores niveles de plasticidad neural.

Técnicas quirúrgicas para la transferencia de tendones

El procedimiento quirúrgico para la transferencia de tendones varía en función de las necesidades específicas del paciente y del grupo muscular objetivo. Las técnicas pueden incluir la coaptación del tendón de extremo a extremo o de extremo a lado, dependiendo de factores como la longitud del tendón, la disponibilidad de tejido blando y el grado de daño tendinoso.

El tejido Pulvertaft es una de las técnicas más utilizadas para unir de forma segura los tendones del donante a los del receptor. Consiste en entrelazar el tendón del donante con el del receptor mediante puntos cruzados entrelazados para reforzar el lugar de la reparación. Otra técnica, la sutura de bucle tendinoso, permite ajustes más sencillos durante el proceso de cicatrización y suele preferirse por su sencillez y resistencia.

Cuidados postoperatorios y rehabilitación

La rehabilitación tras la transferencia tendinosa es crucial para garantizar los mejores resultados posibles. El objetivo de la rehabilitación es fortalecer el tendón recién transferido y enseñar al paciente a utilizarlo correctamente. Normalmente se utiliza una combinación de inmovilización, fisioterapia y reintroducción gradual del movimiento funcional.

En los casos de transferencias tendinosas sinérgicas, los pacientes tienden a adaptarse más rápidamente, ya que el nuevo movimiento tendinoso imita fielmente la función del músculo original. Sin embargo, las transferencias más complejas pueden requerir largos periodos de rehabilitación, sobre todo cuando el paciente necesita volver a entrenar al cerebro para coordinar el movimiento recién establecido.

Conclusión

La cirugía de transferencia tendinosa es un procedimiento avanzado que puede mejorar significativamente la calidad de vida de las personas que sufren lesiones de nervios periféricos o desequilibrios musculares congénitos. El éxito de la intervención depende de varios factores, como la evaluación preoperatoria, la selección de los músculos donantes y la precisión con la que se redirige el tendón. Con los cuidados adecuados y un enfoque bien pensado, las transferencias tendinosas pueden restablecer funciones esenciales de la mano y las extremidades, mejorando la capacidad del paciente para realizar tareas cotidianas y aumentando su bienestar general.